¡Calurosos saludos!
Como sabréis hace ya aproximadamente dos años hubo un terrible terremoto en Japón que desencadenó además en un tsunami que provocó miles de víctimas y millones de euros en daños materiales. Y por si fuera poco, ha degenerado en la catástrofe nuclear más importante desde Chernóbil en 1986.
La central nuclear de Fukushima sufrió gravísimos daños estructurales en los sistemas de refrigeración de uno de los reactores hasta sufrir una explosión, tuviendo que evacuar a la población en un radio de 20 km.
En los últimos meses la compañia responsable Tokyo Electric Power (TEPCO) ha estado contruyendo un muro de contención de 100 metros de longitud para el agua subterránea contaminada que hay bajo la central y así evitar su salida al mar pero resulta que debido a las lluvias y filtraciones, el líquido elemento ha superado el sistema aislante y el Gobierno nipón estima que diariamente se vierten cerca de 300 toneladas de agua radioactiva al mar.
Como medidas alternativas TEPCO a mediados de agosto quiere tener listo un sistema con unas 30 tuberías que puedan extraer 100 toneladas de agua al día que lleven a unos depósitos donde se filtre y se recicle para usar posteriormente como refrigerante en los reactores. Además se ha propuesto un sistema novedoso en el mundo que rebajaría de las 300 toneladas vertidas a 60, que consiste en congelar el agua del subsuelo que rodea a los reactores de la central por unas tuberías aislantes que tendrían una extensión de 1,4 kilómetros de largo, pero que de momento el Gobierno no se atreve a llevar a cabo.
Esperemos que todo este arduo trabajo consiga controlar y detener el agua radioactiva porque se estima que la desmantelación total de la central puede llevar de 30 a 40 años.
Los defensores de las centrales nucleares no sé como argumentarán los casos como éstos, que tanto tiempo se llevan avisando. Sin nada más que decir por hoy: el técnico ambiental.
Es ciertamente curioso que algunas personas se empeñen en decir que estas centrales son completamente seguras cuando la experiencia nos demuestra lo contrario, puedo creerme que tengan sofisticados elementos de seguridad, pero cuando estos elementos fallan las consecuencias son catastróficas, y con catastróficas quiero decir miles e incluso millones de vidas en juego y daños medioambientales que pueden perdurar en el tiempo miles de años.
¡Buenas! No puedo estar mas de acuerdo contigo. Gracias por tu visita. Siempre eres, o sois mejor dicho, bienvenidos. 🙂
Pues deben apurarse, porque los daños tardarían en repararse. Es una verdadera lástima, ojalá y no pase a peores.
Ojalá Javi, ojalá!
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No hace falta ser un entendido para saber que hay daños que ya no se van a arreglar nunca más.
La lástima es que se continúen haciendo cosas mal, parece que primero es el efecto sorpresa cuando pasa algo pero luego continuamos en las mismas. (Lo digo por temas de las nucleares de Tarragona y de gente que trabaja dentro y me ha contado cosas).
¡Hola! Es que hay muchos intereses político-económicos que no nos cuentan porque no interesan que se sepan y punto. Si todo el mundo tuviera un panel solar en su casa, el Gobierno no sacaría beneficio de eso y mucho menos las centrales eléctricas del país. Han pasado 30 años de lo ocurrido en Chernobil y las vacas siguen dando leche con niveles de radiación nocivos para el ser humano y a las pobres familias que allí tienen les hacen análisis anuales como conejillos de indias.
Un saludo y pasate por aquí cuando desees.
Hola! que tal todo? espero que bien. Muy a mi me pesar traigo malas noticias, no se si has visto los informativos pero el nivel de radiación se ha multiplicado por 18 (entre 70 y 1800 mSv/h) y una exposición de 4 horas puede ser mortal http://www.rtve.es/noticias/20130901/continua-fuga-agua-radiactiva-fukushima/744160.shtml
Hola! Al final ha pasado lo que dijimos hace unas semanas, que no nos contaban todo lo que pasaba realmente y se les está escapando de las manos. No me huele nada nada bien. Me paso por tu blog y te dejo otro documental sobre Chernobyl 😉